Tecnología Biodry
La tecnología Biodry es una solución natural, segura y definitiva que se fundamenta en un principio físico natural para detener el ascenso progresivo de la humedad sin requerimiento de métodos invasivos, ni agresivos. Biodry es 100% efectivo ya que es el único sistema que comprende la verdadera causa que provoca esta patología y actúa sobre la misma.
Ningún aditivo químico, ni emisiones electromagnéticas o intervenciones invasivas en el edificio. Es la fuerza de nuestro dispositivo. La humedad por capilaridad es un flujo continuo de moléculas de agua que suben por las micro-porosidades del material por atracción de los muros en contacto con el terreno. A pesar de la fuerza de gravedad, la humedad puede alcanzar alturas muy elevadas, sobrepasando los 4 metros de altura.
Las consecuencias de un edificio con problemas de humedad en los muros, son la cristalización de las sales, observadas como un polvo blanco, que debilitan la estructura del edificio destruyendo los ladrillos, desquebrajando las piedras y desconchando la pintura y el revestimiento. Además, el aumento de la humedad favorece el crecimiento de moho y hongos que generan malos olores y diversos problemas de salud.
¿Cómo funciona Biodry?
La edificación se encuentra expuesta a interferencias eléctricas naturales que crean una diferencia de potencial eléctrico en el interior del muro. El potencial eléctrico aumenta y la fuerza de cohesión de la molécula de agua se ve incrementada, así como la capacidad capilar del material de construcción.
Una vez instalado el dispositivo Biodry, capta como una antena la señal eléctrica natural y se pone en frecuencia. (Fenómeno físico más conocido como resonancia).
Biodry se adapta a la señal eléctrica terrestre y la refleja en dirección opuesta (fenómeno llamado CONTRAFASE). Dos fuerzas de igual intensidad contrarias se anulan como nos indica una ley física. Biodry de esa manera elimina la interferencia eléctrica y consecutivamente el potencial eléctrico.
La señal se transporta a través de la onda natural del campo magnético terrestre por un radio de algunas decenas de metros sin crear electrosmog. Las paredes pierden la característica eléctrica que incrementaba la humedad por capilaridad y se secan de forma natural por evaporación y por gravedad.