Las diferencias técnicas y funcionales entre Biodry y otras tecnologías disponibles en el mercado
Biodry es un sistema totalmente pasivo y autosuficiente que no utiliza fuentes convencionales como por ejemplo la corriente eléctrica, que resuelve definitivamente y de manera natural el problema de la humedad de ascenso capilar.
Se trata de una tecnología que actúa sobre la perturbación eléctrica presente en los muros. Esta perturbación es precisamente la causa del ascenso capilar, que determina la capacidad de atraer más moléculas de agua desde el muro hacia arriba, pero que el dispositivo Biodry es capaz de cancelar en una hora y media después de su instalación.
La tecnología Biodry es bio-compatible y no crea alteraciones en el medio ambiente (no emite).
Cuando es necesario instalar varios dispositivos en el mismo edificio, no hay áreas donde la efectividad del dispositivo se reduce ni crea áreas de NO operación.
El dispositivo Biodry es versátil, se puede colocar en muchas áreas manteniendo la misma eficacia.
No es invasivo y su estética discreta pasa desapercibida una vez se instala en la pared.
Mantiene la eficacia incluso en presencia de barreras metálicas (puertas metálicas, mallas electro-soldadas, etc.)
No es necesario buscar acuíferos para que el dispositivo sea eficaz.
Por lo tanto, la tecnología Biodry actúa eliminando el origen del problema de la humedad ascendente por capilaridad.
Existen otras tecnologías en el mercado que pueden verse similares y que también utilizan dispositivos que instalan en la pared o techo, pero la diferencia fundamental con Biodry es que estos dispositivos actúan sobre la molécula del agua y no con la perturbación eléctrica que es la causa real del problema.
¿Qué significa esto? Significa que aún son efectivos, invierten la dirección del agua, pero la perturbación dentro de la pared permanece sin cambios, como antes de la instalación del dispositivo.
La aplicación de esta tecnología mantiene al muro la capacidad de atracción de la molécula del agua y por lo tanto, incluso invirtiendo la polaridad hacia el suelo, todavía existe el riesgo de que la pared no se seque por completo.
Esto se aplica a dispositivos que pueden verse parecidos a Biodry (no eléctricos). Sin embargo al tratarse de sistemas activos que generan un campo de acción, donde se requiere de más de un equipo, pueden crear áreas de NO operación entre ellos.
En cuanto a los dispositivos eléctricos, la diferencia es fundamental: el dispositivo eléctrico emite una onda de la misma frecuencia y por lo tanto intenta secar la pared empujando la humedad hacia abajo a través de este impulso, pero la perturbación eléctrica que genera el ascenso capilar es muy alta y variable, por lo que cada milisegundo cambia su frecuencia.
En cambio, el dispositivo eléctrico emite una sola frecuencia y, por lo tanto, no puede cancelar la perturbación eléctrica presente en el muro y, en consecuencia, no puede resolver el problema de la humedad de ascenso capilar, ya que la perturbación eléctrica que lo genera cambia continuamente su frecuencia.
También hay que añadir que, si en los materiales que componen la pared hay escasa presencia de silicio, el propio impulso eléctrico del dispositivo incluso se detiene en la primera capa de la superficie, rebotando hacia fuera por la falta de silicio que hace como conductor de la humedad interior.
Es por ello que cuando vemos una instalación con un dispositivo eléctrico muchas veces nos encontramos con un aumento claro y progresivo de la eflorescencia salina, provocada por la subida y bajada de las moléculas de agua, sin solucionar el problema.
En conclusión, Biodry es la primera tecnología que ofrece una solución definitiva al tratar el problema desde su causa (perturbación eléctrica) y no desde su consecuencia (molécula de agua). Siendo además autosuficiente y pasivo por lo que no emite ningún tipo de radiación a diferencia de los otros sistemas disponibles en el mercado.